viernes, julio 30, 2010

Pasado.

Cuentan las antiguas crónicas que hubo un tiempo en el que la gente perdió la consciencia y se dedicó a vivir; que hubo un tiempo en el que se rezaba para que lo imposible se pudiese realizar; que hubo un tiempo en el que se temía al tiempo. Relatos con principio y final cuya razón principal de existencia ha sido escribir todas esas frases irrepetibles surgidas de los más profundos resentimientos de autor. Anónimos espíritus sin dueño, candela y lumbre, hojas crujientes de un otoño agónico, chatarra esparcida por campos de amapolas, historias sin más…

Cuentan las antiguas crónicas conceptos incomprensibles mientras él vuelve a torcer su rostro hacia la esquina del disimulo para no aceptar su misma incomprensión, sus mismas acciones, su mismo ánimo dependiente del recuerdo, la ausencia y los silencios. Expresiones que son gestos que se dejan intuir (pero nunca afirmaciones), adivinanzas presentidas (pero nunca confirmadas) en el universo de sus imposibles, con un espacio tan vasto como el dominio de sus sueños: área inalcanzable hasta el horizonte.

Y piensa si lo cotidiano le destroza, tal y como suele notarlo, y anhela auparse a un taburete (¡Serrat!) para coger un hilo de araña al vuelo, para que su recuerdo perdure cuando ya no esté por estos lugares, para que el olvido no se haga carne…

../.."Quiero cerrar los ojos y olvidar todo lo que esta noche
me recuerda a vosotros y a mi y a mis poemas." ../..
José Luis Piquero

P.D. Presente: hablan gatos nocturnos de la melancolía que no quiere irse, de la imaginación restante, de señales y acentos (sílabas bajo la luna llena). Y desde el otro lado de los tejados se rumia una sonrisa cómplice: la imaginación al poder!!

viernes, julio 23, 2010

Presente




















Cuando Pablo Méndez presentó Ana Frank no puede ver la luna (Ediciones Rilke), allá por el mes de Febrero, no pude asistir al acto por motivos personales. Tenía desde entonces una gran curiosidad por saber cómo era el libro de Pablo y esa curiosidad ha quedado satisfecha después de nuestra última comida y la lectura del libro.

Tiene Pablo Méndez un estilo sencillo, quieto, de pasmosa reflexión, que otorga a sus poemas una cadencia cotidiana sin orfebrería pero con hondo significado. Dividido en tres partes (Gato viudo, París estación y Pequeña estación abandonada) el libro nos demuestra a un Pablo Méndez en estado puro, apuntando a la diana con tremenda puntería: la amistad (presente y ausente), la poesía, los libros, la melancolía o la nostalgia son conceptos que el autor va desglosando con una gran sencillez y con una gran visión.

Gato viudo es un espejo desgarrador del poeta: pizcas de pesimismo con esperanza ("la vida no es nada, detrás/de cada hombre no hay nada,/si lo piensas, sólo el reloj/y el amor a la vida"), reminiscencias y agradecimientos a personas queridas, la amistad ("Adjudico a la amistad/el peso más elevado de la vida"), la poesía, la pérdida de la infancia, los recuerdos y, en varios poemas, el recuerdo de la madre muerta.

París estación es un escenario donde nuestro poeta situa a personajes relacionados con la literatura (Azorín, Neruda, Rubén Darío, Machado...) para dar un toque existencial dentro de una ciudad de ensueño y bohemia.

Pequeña estación abandonada, por último, es un muestrario de definiciones agudísimas de distintos conceptos ("niño:/lugar de donde/nadie vuelve"; "memoria:/escalera de trenes/para bajar subiendo"; "otro:/yo/para ellos")

En resumen: una excelente y refrescante lectura para este verano tan caluroso.
Os dejo un poema para rematar la entrada.


ANA FRANK NO PUEDE VER LA LUNA

Hoy, Ana Frank cumpliría ochenta años,

¿cómo será ese sueño hondo
de cumplir y cumplir
ochenta años?

quien puede bajarse
del tren de la vida y mirar caminos
ochenta años

ochenta, ahora tendidos
en el árbol viejo de la muerte,

ochenta años

yo miraré por tí los fresnos,
apagaré las velas,
celebraré la luna,
besaré a mi mujer,
este es mi regalo:
felicidades.

jueves, julio 22, 2010

Presente.

CANCIÓN SENIL

(La infancia es la reina del mundo
José M. Campos)

Trae guardado en el bolsillo
dos estrellas y un espejo,
las canicas, la peonza,
un barco filibustero,
un bandido sanguinario,
un balón de reglamento,
las espadas, los arneses
y un corcel de terciopelo.

Que yo guardaré en mi alma
tantos días sin reencuentros,
los atascos, las facturas,
la bronca de aquel negrero,
el tiesto que ya es marchito,
una nube que es tormento
y, si quieren enterrarme,
un pequeño crisantemo.

(Inédito)

jueves, julio 15, 2010

Presente.

INFIDELIDAD

Hace falta sufrir mucho,
sentir sulfuro en las lágrimas,
poder perder,
para llegar a entender esos signos
que nos marcan el dolor en el alma
como a reses metafísicas dispuestas
al matadero.

Y pedir perdón
por aquellos rutilantes
días del pecado
circunstancial.

(De Rastros perdidos)

lunes, julio 12, 2010

Pasado.

Ha cambiado el inicio de esta nueva entrega para abrir las compuertas al chorro de pensamientos que luchan por salir de los resultados del último electroencefalograma. Ha cambiado no sólo el inicio del escrito sino el desarrollo de sus actuaciones. Él no se recordaba así (en realidad, no se recordaba) y da por bien empleados los balbuceos y las tartamudeces por los minutos de escritura a un cuaderno querido.
Apenas importa un lugar o una fecha (¿alguna vez dijo que el tiempo se detenía?) cuando son meras anécdotas de un todo deseado. Lo importante, lo verdaderamente importante, es poder admirar la profundidad de unos ojos, la sonrisa de unos labios y la caricia de unos cabellos. Lo importante, la magnitud equiparable al infinito, es mostrar el pecho cerrado durante lustros, al espejo de las palmas de unas manos. Y no sentir dolor.
Lo importante es que…

../..No he vuelto nunca a verte, aunque a veces me llegue
como un dulce mordisco, tu nombre en otra boca. ../..
Rodolfo Serrano

miércoles, julio 07, 2010

Presente.




















Desde la aparición del libro Insistir en la noche de Rafael González Serrano (de cuya presentación pude disfrutar hace un par de meses, en un acto organizado por Vitruvio, bajo la batuta de Pablo Méndez) he querido leerlo y releerlo hasta citarlo en este mi pequeño espacio.
Evidentemente, cuando hablo de Rafael González Serrano no puedo ser objetivo: la amistad es un muro lo bastante sólido como para no dejar paso a la visión de los defectos, si los hubiera. Y, por supuesto, no voy a desmembrar el libro en una crítica meticulosa cuando considero que cualquiera que lo lea sacará sus propias conclusiones.


Juega Rafael en Insistir en la noche a buscar e indagar lo extraño, lo no acontecido, lo ignoto (ya nos avisa en el prólogo: La noche es, aún más, el territorio de lo desconocido, de lo que no se sabe y ha de ser interpretado) con un estilo, ese suyo, tan personal y que difícilmente podría confundirse con otro autor: poemas largos, trabajados, rítmicos, con un amplio surtido de formas métricas y con ese fondo tan particular a la hora de crear y que ya percibimos en sus dos obras anteriores. Incluso -novedad sorprendente- se atreve con un soneto (Rumor de rebeldía) que nos deja con hambre de más. Hay, incluso, varios posos de soledad, desengaño, ironía..atizados con la pluma desinhibida de un autor que sabe lo que escribe y cómo quiere escribirlo.

Es un acto trabajado la lectura de Insistir en la noche, un reto permanente para comprender los ocultos significados de las variadas formas que utiliza el poeta en cada título: un menú exigente para gourmets entendidos.

Como no voy a entrar en más consideraciones os dejo algunos versos de los distintos poemas de esta última obra de Rafael González Serrano.
Enhorabuena, amigo, por el alumbramiento!

Los senderos se escriben
sobre libros de agua (De Clépsidra)

No anochecen horas, son
instantes adelgazándose
por la trama inconsútil
de la túnica del olvido (De Encrucijada)

El polvo de la memoria
duerme en sábanas,
sudarios que amortajan
los muebles sepultados (De Casa deshabitada)

Hay calles donde la lluvia
arrastra promesas abandonadas (De Dolor de calle)

Alimento saltos en el tiempo
buscando mapas sin fronteras (De Tigres en la niebla)

Gotas de instantes destilados
resbalan del alambique del insomnio (De Insomnio)

jueves, julio 01, 2010

Presente.

PSEUDOHAIKU DEL APÁTRIDA

Tristeza al doblar una esquina
Tañido de pasos en música de hormigón
Pronóstico abatido de sombra perpetua

(Inédito)