Pasado.
Hay ocasiones en las que se mira a la vida por un espejo retrovisor mientras se va en movimiento. Las cosas, los objetos, van quedando atrás con una velocidad que oscila según se quiera escapar más o menos rápidamente de ellas.
Hoy fue viernes y alguien robó las gallinas risueñas del corral de la sinrazón.
El mundo es una metáfora, el tiempo una polisemia y el dolor una característica habitual genéticamente probada.
El complemento del complemento es un accesorio inútil la mayoría de las veces: no vale para señalizar ni la más mínima avería que le empuja al arcén.
Una lluvia púrpura en concierto le empapa con las últimas palabras de los fantasmas acomplejados.
Y este montón de frases seguidas, inconexas, significan poco para quien no esté acostumbrado a los peligros que nacen de la locura.
../..”Un nombre, sólo un nombre. Sálvalo de la niebla
y ponlo en la balanza de las postrimerías:
quizá su peso sea el de tu vida.”
Pablo García Baena
Efectivamente el mundo es una metáfora. Dios, Jose da gusto leerte, siempre sabe a poco. Eres una maravilla. Un beso.
ResponderEliminarDirectamente, el complemento es inutil, todo es inutil.
ResponderEliminarbella improvisacion!muy buen trabajo! amigo,que pasa y no deja coment!
ResponderEliminardeja algo, un signo, algo que perdure...
un abrazo,besos
lidia-la escriba
http://www.deloquenosehabla.blogspot.com
Estupendo. Todo un grafismo de nuestra decadencia y mediocridad. ¡Bravo!
ResponderEliminarUn abrazo
Tiempo y dolor van inevitablemente emparejados y, a su vez, cargados de complementos inútiles.
ResponderEliminarUn saludo desde el norte José Luis,
Cristina
Demasiado generosa, María.
ResponderEliminarTú sí eres un encanto.
Gracias y un beso!!
Directo y conciso, como tu diario,
ResponderEliminarGracias por seguir pasando, amigo!!
Perdurar no es existir, amiga Lidia,
ResponderEliminarVolveré a verte.
Abrazos lejanos!!
Bienvenido Julio!!
ResponderEliminarYa dejaré huella de mi visita en tu espacio.
un saludo!!
¿Seguro que todos los complementos son inútiles?
ResponderEliminarLeyéndote no me lo parecen.
Siempre agradecido, Hibiscus.
Un abrazo!!