Pasado.
Él se ha ido. Ausente, las pocas briznas de sonrisa se mecen con el breve soplido del viento que se cuela por una ventana semiabierta. La estancia, vacía, acumula un tapiz de polvo que acaricia la madera. Nada lleva a su recuerdo en su ausencia: ni la mirada fija sobre las fotografías, ni el tacto áspero de la pared abandonada. Él se ha ido y el sol se filtra -cuchillas resplandecientes- sobre la persiana desfallecida y crea unas salpicaduras brillantes como novas indefinidas, inmensas e inabarcables.
El recuerdo del hombre no existe, nada es ya más que una concatenación de imágenes fugaces y rápidas que, borrosas, crean dolor en la mirada.
La estancia, vacía, aún guarda gemidos y risas, canciones y versos, minutos prohibidos, paisajes remotos, abrazos de vidas paralelas, penitencias y oraciones.
La luz del sol apenas permite discernir las flores marchitas de los pétalos dormidos, antaño reinas de belleza en concursos universales, que alguna vez prendieron del cabello suave de las ninfas del crepúsculo.
La ventana de párpados caídos enseña un paisaje taciturno de sombras deambulantes acodadas en las esquinas de los bordillos.
Como en un cuadro, lo inmóvil es pleno.
En el exterior, repiquetea un gorrión.
../..”El frío quema y en tus ojos nace
su memoria. Recordar es obsceno
peor: es triste. Olvidar es morir.”.../..
Vicente Aleixandre
también me gusta.
ResponderEliminartambién me quedo.
saludos
Te leo y siento la ausencia aun duele casi lo siento mío.....
ResponderEliminarBesos
Hermosa prosa poética. Dolor de ausencia que se palpa.
ResponderEliminarEncargué tu libro, ya te comentaré.
Besos.
BELLISIMO POEMA!muchisimas gracias por pasar a comentar en mi blog,de verdad,muchisimas gracias!
ResponderEliminarun abrazo inmenso,besos
lidia-la escriba
Eres único en este tipo de poesía. Genial como siempre. Besos de nuevo. :).
ResponderEliminarSiempre bien recibido.
ResponderEliminarGracias y un saludo!
Cuanto tiempo Nina!!
ResponderEliminarBuen retorno y un abrazo!!
Gracias Soco: ya me dirás qué te parece el libro.
ResponderEliminarBesos!
Gracias Lidia!
ResponderEliminarAbrazos peninsulares!
Tú, como siempre, tan generosa en tus comentarios María.
ResponderEliminarUn beso!!